6 cuidados básicos para mantener tus flores en verano

El verano sevillano es sinónimo de sol, luz y mucho calor. Y aunque las altas temperaturas pueden ser un reto, también es una temporada en la que las flores de verano lucen con todo su esplendor. En La Rosa de Oro, tu floristería en Sevilla, te contamos cuáles son los cuidados esenciales para que tus flores se mantengan frescas y bonitas durante toda la temporada estival.

¿Qué son las flores de verano?

Las flores de verano son aquellas especies que resisten bien las temperaturas elevadas y la exposición al sol. Algunas de las más populares son los girasoles, las gerberas, las margaritas, las zinnias o las lavandas. Su colorido intenso y su capacidad de adaptación las convierten en las grandes protagonistas de la temporada, tanto en ramos como en centros decorativos o plantas de exterior.

Pero, ¿cómo cuidarlas correctamente cuando el calor aprieta?

1. Evita la exposición directa al sol

Aunque muchas de estas flores son resistentes, no todas toleran la luz solar directa durante muchas horas. Coloca tus arreglos florales en un lugar luminoso, pero alejado de las ventanas por donde entra el sol más fuerte. Si las tienes en el exterior, protégelas en zonas de semisombra.

2. Cambia el agua con frecuencia

En verano, el agua se calienta y se contamina con más rapidez. Cambiar el agua cada uno o dos días es clave para que tus flores cortadas se mantengan frescas. Además, limpia bien el jarrón antes de volver a llenarlo.

3. Recorta los tallos en diagonal

Antes de colocar las flores en agua, corta los tallos en un ángulo de 45º. Esto facilita la absorción del agua. Repite este paso cada dos o tres días para que se mantengan hidratadas y vivas por más tiempo.

4. Retira las hojas sumergidas

Las hojas que quedan dentro del agua favorecen la proliferación de bacterias. Elimina todas las hojas que puedan tocar el agua del jarrón para evitar que se deterioren antes de tiempo.

5. Utiliza conservantes florales

En La Rosa de Oro, recomendamos usar un sobre de conservante floral. Añadirlo al agua ayuda a prolongar la vida de las flores y mantener su color y fragancia. Si no tienes conservante, una pizca de azúcar y unas gotas de vinagre blanco pueden servir como alternativa casera.

6. Evita colocarlas cerca de frutas o electrodomésticos

Las frutas maduras emiten etileno, un gas que acelera el marchitamiento de las flores. Lo mismo ocurre con el calor de electrodomésticos como el microondas o la televisión. Busca lugares frescos y ventilados para tus ramos.

Disfruta del verano con flores frescas

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¡Haz que este verano florezca como nunca!